Control de plagas en restaurantes

El control de plagas en restaurantes se asocia frecuentemente a una actividad reactiva: se realiza para eliminar algo que ya existe. Pero, en realidad, es más eficaz e importante no llegar a eso. Para ello, es imprescindible la correcta prevención.

Tanto por costes como por repercusión, la prevención se impone como el sistema más apropiado para evitar problemas con posibles plagas en restaurantes y hoteles. Máxime con las cada vez más exigentes normativas respecto a salud pública en el uso de sustancias químicas de uso común en el control de plagas. Además, estos establecimientos deben formar parte activa de esta lucha, demostrar la inexistencia de plagas y mostrar cómo ejercen dicho control, para no caer en duras sanciones.

Pero quizá la mayor sanción sea la pérdida de confianza. Hoteles y restaurantes deben asegurar niveles mínimos de salubridad, para garantizar la salud de sus trabajadores y clientes. Para ello, lo primero es acudir al personal técnico especializado de una empresa acreditada y registrada.

Estos profesionales analizarán el establecimiento y sus usos, para recomendar y ejecutar las acciones pertinentes, ya que cada plaga tiene sus características y soluciones. Según el análisis, se determinará el método de exclusión, restricción, monitorización y destrucción de plagas, para:

1. Evitar su entrada.

2. Evitar que se acomoden.

3. Detectarlas.

4. Eliminar las visitas inevitables.

Bajo la tutela de profesionales se puede ejercer la prevención en materia de control de plagas en restaurantes y hoteles mejor y con más seguridad. Ante una plaga, solo la empresa profesional puede, de verdad y con garantías, proteger la salud de los trabajadores y clientes en la restauración.